¿Quién dentro del mundo de los
eSports no ha oído hablar de Dota? Ese juego que sentó las bases de los MOBA, juegos
multijugador de batalla de arena en línea, que dio paso a League of Legends y a
Dota 2, dos de los juegos más relevantes actualmente dentro de los deportes
electrónicos. En esta entrada, me centraré en el Dota 2
El Dota 2 es el segundo eSport
más jugado, pertenece a Valve, y se distribuye a través de la plataforma de
Steam de forma totalmente gratuita, donde es el juego más jugado con casi 12
millones de jugadores muy activos.
La base de Dota2 es la misma que
la de League of Legends, hablamos de un estilo de juego de 5v5, con el objetivo
de destruir la base enemiga, que en este caso en vez de nexo se denomina
ancestro. Para ello cuenta con 112 campeones a elegir, en lo que también se
diferencia de su rival, el LoL, ya que este cuenta con 127 campeones
actualmente.
En comparación con su gran competidor
por el podio, el Dota 2, posee un número de objetos elevadísimo, lo que hace
que las opciones sean tan numerosas como complejas, donde un error puede
costarte la partida. Además los campeones nuevos que van surgiendo se van
realizando con más calma y detenimiento,
de ahí que el número de ellos sea más reducido.
El mapa también ofrece
diferencias, en League of Legends es por así decirlo estático, no se puede
modificar, sin embargo, Dota2 te ofrece la posibilidad de abrirte paso entre
los árboles que están presentes en las respectivas junglas que son mucho más
frondosas que en LoL, esto abre numerosas tácticas nuevas lo que complica aún
más las decisiones que debe tomar el jugador.
A pesar de eso, la esencia es la misma, 3 caminos que conducen a respectivas bases, aunque, en este caso, lo que importa es lo que hay en medio, una inmensa jungla donde te esperan sorprendentes batallas, que obligan al jugado a estar siempre con los ojos abiertos.
A pesar de eso, la esencia es la misma, 3 caminos que conducen a respectivas bases, aunque, en este caso, lo que importa es lo que hay en medio, una inmensa jungla donde te esperan sorprendentes batallas, que obligan al jugado a estar siempre con los ojos abiertos.
En cuanto al apartado técnico se
nos presenta un juego muy gráfico que lleva al jugador a necesitar algo más que
un ordenador, una pantalla y un ratón. Además la estética tanto dentro del
juego, como fuera, es extenuante, muy intrincada, tanto que puede llegar a
saturar al usuario con excesiva información mal ordenada.
Todo esto lleva al Dota2 a ser un
juego muy completo, pero a su vez complejo, del que no se puede aprender con
facilidad debido a que utiliza unas mecánicas muy técnicas y un desarrollo del
jugador excesivamente lento y dificultoso. A pesar de todo, esto tiene una
recompensa, cuando consigues a aprender
a jugar, la satisfacción del jugador es sencillamente, mágica.
La clave de su éxito, sin duda se
puede decir que reside en las grandes bases que asentó su predecesor, Dota, ya
que este simplemente es una renovación del mismo, con nuevos campeones. Su esencia
es totalmente contraria al LoL, todo está muy medido, se escucha mucho más a la
comunidad, sus jugadores suelen ser experimentados por norma general y en pocas
ocasiones encontraremos jugadores casuales y ofrece un tiempo más lento y
táctico.
Si bien esto podría interpretarse
como una mala estrategia ante su competidor, no se debe ignorar el hecho de que
Dota 2 lleva más de 10 años en el mundo de los deportes electrónicos y posee
una comunidad asentada de jugadores fieles.
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